La Indiferencia es uno de los peores males de nuestro tiempo, de nuestro mundo y hasta de nuestra Iglesia. Es ese fino polvo del camino que se nos va pegando y no vemos hasta que nos pesa demasiado y tenemos que hacer uso urgente de la lavadora, o debemos sacudirnos o antes posible para que no nos ensucie.
Pero el problema, sea, quizás, que hasta nos acostumbramos a ser indiferentes, casi incoloros, insípidos, indoloros, inamovibles… y con todos los “ín” que podamos imaginar, y que significan ausencia de una especificidad concreta, que hacen que, tengamos otra innecesaria en demasía.
Es uno de los grandes problemas que vemos a nuestro alrededor, pues nos pasamos el tiempo pasando de todo, si que ya, nada de lo que es de verdad importante, tenga que ver con nosotros, pues ni nos planteamos la asunción de unos valores necesarios e indispensables para todos nosotros.
No nos planteamos las cosas más importantes, sino que vivimos a lo que venga, y eso no nos hace pensar ni reflexionar, pues preferimos estar como estamos a aceptar un cambio o a darle entrada en nuestra vida a algo novedoso que nos haga cambiar o aspirar a cosas mejores y superiores.
Y por eso hoy, en la Palabra, llama la atención que Jesús nos pida dejarlo todo y seguirle a una aventura nueva y plenificadora de nuestra vida. Él no se cansa que lanzarnos su invitación para que busquemos ser algo más y para que no vayamos a lo de siempre, porque esto nos va a dejar como siempre. No podemos olvidar que, si el creyente no se implica, no se compromete con lo que tiene que ser su vida, se queda un mero adorno, indiferente al devenir de la historia, al paso de los hermanos y al paso de Dios por su vida
Ya es hora de remar mar adentro y de aceptar retos y cambios en nuestra vida cristiana y de fe, ya es tiempo de no tener miedo a lo nuevo y a las nuevas llamadas de Dios en el mundo y en la historia. Ya es tiempo de dejar de poner pañitos calientes y comenzar a llamar a las coas por su nombre y actuar al estilo de Cristo: con pasión y a por todas. La campaña de Manos Unidad de este domingo, puede ser un buen momento para comenzar.
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